La plataforma sevillana se ha concentrado hoy a los pies de la Giralda para presentar un manifiesto que exige al Gobierno central y a los grupos parlamentarios “que se devuelva al uso público lo que es de dominio público”
Bajo el lema “Recuperemos el Patio de los Naranjos”, la plataforma sevillana que trabaja para denunciar las inmatriculaciones ha solicitado al conjunto de administraciones, en una concentración celebrada en el día de hoy, “que se impliquen para revertir las apropiaciones que ha hecho la jerarquía católica sin ningún título y aprovechándose de la normativa hipotecaria franquista”.
En el manifiesto hecho público durante la concentración, la plataforma denuncia que el listado hecho público por el Gobierno central “está incompleto” e insta al ejecutivo a que lleve a cabo “una acción legislativa global que declare nulas estas inmatriculaciones y regule los bienes de dominio público” porque de lo contrario, según la plataforma, “la ciudadanía estaría abocada a una infinidad de litigios inabarcables uno a uno”.
La plataforma recuerda que “con ese listado, aunque incompleto, se ha podido comprobar que las administraciones eclesiásticas se han apropiado de todo tipo de bienes, no sólo lugares de culto, sino también viviendas, plazas, zonas verdes, cementerios o fincas”. En concreto, el manifiesto especifica que en la ciudad de Sevilla “entre algunas docenas de bienes inmatriculados aparecen unas ‘dependencias anexas’ de la Catedral que se refieren al Patio de los Naranjos y a la Giralda”. Unos espacios, que el manifiesto reconoce como “lugares de encuentro y disfrute de la ciudadanía sevillana durante 800 años y símbolos señeros de la ciudad”.
El manifiesto también aclara que la plataforma “no pretende impedir ni obstaculizar los cultos religiosos que la ciudadanía decida practicar, pero nunca la mezquita ha pertenecido al imán, ni la sinagoga al rabino, ni la iglesia al cura, siempre han sido de la comunidad y a ella deben revertir”.
Por último, han exigido al Gobierno y a los grupos parlamentarios que lo apoyaron “la articulación de una fórmula legal que permita declarar la nulidad de todas las inmatriculaciones realizadas por la jerarquía católica sin título suficiente”. Y también recuerdan al Ayuntamiento “su responsabilidad para definir el Patio de los Naranjos como zona verde en el PGOU” y a la Junta de Andalucía “su obligación para garantizar un Plan Director de Uso y Gestión de este bien protegido declarado como Patrimonio de la Humanidad”.